Un pajarito me enseño a pensar en milquinientas incoherencias a la vez, ese tipo de incoherencias que solo algunos son capaces de comprender o captar. Alucinar, fantasear y soñar con imposibles cada noche de luna llena con los pies en el mar esperando que con su fuerza me haga volar, a un lugar lejos donde todo esta en calma con bellas melodías de fondo.
Surrealistas... Soñadores ¿Y qué más da? Así somos algunos tocados con las pinzas de Morfeo...
Mí vida es una constante utopía, un viaje sin fin a la historia de mi vida que día a día se construye con esfuerzo y dedicación... Una mezcla idealizada con unas gotas de realismo contemporáneo que aún no se quedan en mi cabeza de forma definitiva, cabeza que piensa constantemente en esos perfectos imposibles. Imposibles que solo nos hacen pensar que la vida es hermosa cuando piensas en ellos y luchas por tus sueños. Me haces sonreír, más que ayer. Gracias por mi segunda oportunidad.